Está bien sentirse mal
Está bien sentirse mal y creo que en estos tiempos es más fácil que antes, no sé ustedes pero yo siento una constante presión. Los likes no son suficientes, siento que no aporto suficiente al mundo.
Por: Libertad y sus 19 Universos.
Es fácil sentirse mal cuando cada que entras a cualquier red social, principalmente Instagram, ves la felicidad y las perfectas vidas de los demás. Cuando niñas de 11 años están haciendo mas que tú. Es fácil sentirse menos, less accomplished.
Y eso no está mal, lo que está mal es que dejemos que ese sentimiento nos hunda. Porque es natural compararnos con todas las supuestas “vidas” que vemos en las redes sociales, y está bien, lo que no está bien es no recordar que lo que vemos es solo lo que la otra persona nos deja mirar, que hay más de la foto que no vemos y dejarnos llevar por ese sentimiento de envidia en vez de motivarnos para ser una mejor versión de nosotros mismos y vivir nuestros momentos al cien.
El sentirse mal está bien siempre y cuando hagamos algo al respecto. Por ejemplo: Me siento mal porque no me siento cómoda en mi cuerpo y me duele ver todas estas fotos de mujeres con un gran físico. Entonces, primero: recuerdo que mi cuerpo es mío y solo por eso merece ser amado por mí. De ese amor nace el deseo de cuidarlo y mantenerlo saludable, comer equilibradamente, hacer ejercicio, ir al doctor cuando algo no se siente bien. Segundo, reconozco que las personas que veo en estas fotos se esforzaron y tuvieron constancia en su buena alimentación y planes de ejercicio. Y que ningún cuerpo es igual a otro y esto se trata de un estilo de vida más saludable.
Y esto me lleva a mi último punto. Está bien sentirse mal pero una parte importante para volvernos a sentir bien es no solo cuidar nuestra salud física sino también la mental, ir al psicólogo, rodearnos de influencias positivas, nosotros ser influencias positivas para nosotros mismos y los demás, reconocer nuestros errores, celebrar nuestros logros, tomarnos 5 o 10 minutos en el trabajo para relajarnos las veces que sean necesarias durante el día, respirar, no quedarnos con nuestros sentimientos.
Cuidarnos como un todo y no como partes.
Está bien sentirse mal, lo que no está bien es fingir que nada está pasando y no hacer nada al respecto. Tú eres la única con el poder de cambiar ese sentimiento y yo sé que puedes.
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