Probamos un Volvo y se volvió el auto familiar (con perritos)

Ustedes saben que yo no sé nada de autos, ja. Ni conduzco. Pero ahora tuve la oportunidad de dar unos paseos con un grupo de amigos y sus familias y me tocó el raid en uno de estos vehículos. Les quiero contar mi experiencia.
¿Quién no ha visto que en series de TV se habla de los Volvo como opción de auto para la gente que cuida el medio ambiente? Pues yo no sabía que además de los autos híbridos, también tienen eléctricos… les digo, todo esto es nuevo para mí.
O sea… se carga totalmente de la corriente de tu casa:
Bueno, pero mis compañeres no tenían uno así como el de la foto, ja, pero me sorprendió que el híbrido también es cero emisiones de gases de escape.
De lo que sí sé es de que fue una experiencia súper cómoda y silenciosa, es rarísimo cómo no te das cuenta de que un auto suena… hasta que no suena, ¿les ha pasado? Seguro me entienden.
Punto del Volvo si tienes perrhija
Además, me encantó que los asientos no son de piel pero parecen, así que es perfecto para llevar a Cinna, mi perrita, suelta, ya que ella deja muchos pelitos en todos lados y así es fácil de limpiar. No, no se preocupen, fue en su pequeña transportadora porque ya está acostumbrada a viajar así y no quiero que eso cambie. Pero si viajas con peques o perrihijas como yo, este es un GRAN punto. O bien, no tienes prohibido comer en el auto, ja.
Insisto que no sé nada de autos y mis cuates me hablaban de la alta tecnología que tienen estos autos y yo solo escuchaba bla bla bla, pero el viaje fue irreal. No se burlen de mí, era mi primera vez en un auto así.
El niño que iba con nosotros iba feliz (y más porque iba junto a Cinna, obvi), y me encantó que siempre nos sentimos seguras y seguros en el paseo.
O sea: sí recomendaría este auto y si tuviera el presupuesto y me gustara conducir, definitivamente lo consideraría como un FUERTE candidato.
Un poco sobre la compañía y los Derechos Humanos
¿Que qué? Si me siguen en mis redes sociales (en todas soy @crislata) sabrás que con unas amigas tenemos una fundación en la que trabajamos por los derechos de las mujeres y las niñas en México, Fundación Femmex, y que estoy aprendiendo mucho sobre Derechos Humanos. ¿Y qué tiene que ver eso con una marca de autos? Bueno, yo siempre he dicho que el enemigo del feminismo -y los derechos de las mujeres, claro- es el patriarcado, no los hombre. El patriarcado nos pone en cajas y los hombres no son la excepción. Así que me enteré (husmeando en la página de Volvo) que tienen una política de inclusión en sus plantas… pero además, ¡permiso parental igualitario a mujeres y hombres!
Este es un GRAN paso, primero, porque dejarán de discriminar a las mujeres al momento de considerarlas como candidatas para un puesto… en caso de que “se vaya a embarazar y a dejar de trabajar por un rato”. Al haber igualdad de permiso, ambos sexos (o los fluidos, claro), se ausentarán el mismo tiempo al tener una criatura. ¡PUM!
Segundo, este tipo de permisos afianzan el compromiso de los hombres en la crianza, ¡no más solo tarea de mujeres!
Ya sé que eso no tiene nada que ver con mi experiencia en un Volvo, pero me pareció súper importante hablar del tema porque es algo que se tiene que decir, ¡bien ahí, marca!